“Estás a una decisión de tener una vida completamente diferente.”
Namasté hippies & happies,
¿Hacía cuanto que no publicaba una reflexión en el blog? Hoy vengo con una sobre las decisiones, los cambios y salir de nuestra zona de confort. Esta reflexión ha surgido en un momento de inspiración y en un momento en el que estoy en pleno proceso de despertar y de florecer. Pues como ya he ido comentando por Instagram y en el último post de mi blog, me he dado cuenta de que mi vida últimamente ha comenzado a ser bastante rutinaria y que es la primera vez que llevo tanto tiempo seguido viviendo en un país. Así que he decidido que el momento de mi partida hacia otro lugar tal vez esté llegando. La cuestión es que si me voy de aquí, no tengo ninguna pista, ninguna idea ni ningún plan B, C o Z que me diga qué quiero hacer con mi vida. Hacía años que no estaba tan perdida. No sé cuánto tiempo más me quedaré, pero he decidido que voy a empezar a ir explorando nuevos caminos, qué quiero hacer, qué me apetece, etc. y había pensado que puedo contaros un poquito cómo sobrellevo los momentos en los qué me siento perdida y qué hago para intentar dejar de estarlo.
Antes de comenzar, os cuento que en un cursillo gratuito de Mujer Holística que hice el año pasado proponían realizar un ejercicio llamado La Rueda de La Vida y que consiste en ir puntuando del 1 al 10 cómo de feliz o satisfechos nos sentimos en distintos ámbitos de nuestra vida, una vez que lo tengamos listo, deberemos de unir todos los puntos. Al unirlos, saldrá una forma. Ésta forma debería ser un círculo bien hecho pero si hemos puntuado bajo alguna de las categorías, el círculo quedará amorfo y significará que debemos trabajar en esa zona donde el círculo se tuerce. Podéis ver un ejemplo aquí.
Otro paso vital para mí es, sin duda, conversar conmigo misma y cuestionarme, escribir una lista de preguntas del estilo “¿qué quiero hacer si me voy de aquí?”, “¿dónde me gustaría vivir?”, “¿qué es lo que realmente me gusta?”. Obviamente, las respuestas a todas estas preguntas no caerán del cielo. Igual quiero estudiar algo pero no sé qué, así que para ello debo de probar distintos cursos o leer más sobre ciertos temas en concreto para ver qué es lo que en verdad me interesa. En definitiva, todo se resume a hacer cambios que a su vez, me ayudarán a salir de mi zona de confort, de mi rutina. Y da igual que los cambios sean más lentos o más pequeños, cada uno cuenta. Y por cada uno, deberé sentirme orgullosa. Hasta los pasos más pequeñitos son importantes como por ejemplo probar algo nuevo, puede que suene a tontería pero si tenemos el hábito de desayunar todos los días lo mismo o de ir andando al trabajo por el mismo camino, ¿por qué no cambiar?. Tratar de hacer un pequeño cambio cada semana, así iremos cogiendo soltura.
En cuanto a las preguntas, en mi caso cogí mi portátil y me fui a una cafetería sin Internet a dejar fluir mi inspiración. Creé un documento de Word y me hice una lista de preguntas y pautas para empezar a ir explorando nuevos caminos que me ayuden a saber qué quiero hacer, qué me apetece. ¿Quiero estudiar nutrición? ¿Quiero aprender yoga? ¿Quiero hacer un máster o un curso? ¿Quiero un trabajo como el que tengo ahora pero en otro país? ¿A dónde quiero ir? ¿Qué es lo que quiero?
Y en esas estoy ahora mismo, poniéndome retos y probando cosas nuevas para descubrir qué es lo próximo que quiero hacer. Además, en dos semanas es mi cumpleaños y creo que no podría empezar mi nueva edad con más ganas de cambios jaja. Por cierto, para mi cumple estoy preparando un post especial que espero que os guste.
Mientras tantos, nos seguimos leyendo por Instagram y por mi Newsletter.
Luz y buenas vibraciones hasta el próximo post,
Hippie & Happy
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